Ecos y sombras
Es una instalación expositiva en la que Labuena invita a Nora Baylach, como fotógrafa, a Iker Nafta como creativo y a Igor Losada como maquillador y peluquero, para llenar el Castillo de Montjuïc con todas las posibles mujeres que podrían vivir hoy, ayer y mañana. El resultado: 6 personajes atemporales, encarnados por la artista, textos extraídos de sus diarios ficticios y una instalación de video que corona la exposición. Colibrí Studio y Hiruki Studio acompañaron el proceso artístico en una segunda fase y lideraron la implementación del espacio expositivo.
¿Cuántas mujeres vivieron en el Castillo de Montjuïc antes de ser conquistado por las tropas de Franco? ¿Y después? ¿Cuáles eran sus ocupaciones? ¿Cuál era su rango? ¿Cómo eran consideradas por la gente que vivía en el castillo? ¿Y las que estaban fuera? ¿Cómo eran consideradas socialmente? El Castillo de Montjuic estuvo habitado por hombres, en su mayoría soldados, ¿qué relación tenían con estas mujeres? ¿Realmente había mujeres viviendo en el Castillo de Montjuïc?
Bajo estas preguntas, el Castillo de Montjuïc se llenó con todas las posibles mujeres que podrían habitarlo hoy, ayer y mañana, con una atemporalidad expresamente buscada, encarnadas por la artista multidisciplinar Arantza Labuena.
La mujer sangrienta, impura. La mujer fuerte, peligrosa.
La mujer embarazada, objeto reproductivo. La mujer que no es mujer, invisible. La mujer silenciada, necesaria.
La mujer por ser mujer, mutilada.
La pieza se ubicó en un espacio desacralizado por la iglesia católica y vuelto a sacralizar por la artista, lleno de iconografía totalmente pagana; convertido en un espacio de culto y veneración a través no solo de la imagen, sino con objetos, textos, una luz que nos recordará a la penumbra de las velas y 6 personajes totalmente atemporales.
Todas las imágenes están acompañadas por un extracto de los diarios ficticios de estos personajes.